🤫 El Secreto que Esconde Sunsol Ecoland: Mi Confesión en Margarita

Hay lugares que te roban un pedazo del alma, y luego está Sunsol Ecoland Beach Resort. No voy a hablar de un hotel, sino de un refugio al que accedí recientemente en la Isla de Margarita. Desde el momento en que dejé el asfalto atrás, sentí que cruzaba un umbral. El resort no se muestra, se revela: senderos que serpentean entre una vegetación densa, como venas que bombean vida hacia un mar salvaje. La promesa era unas vacaciones; la realidad fue un encuentro.

La Cueva del Descanso: Habitación "Oasis"

Mi guarida personal se encontraba en el ala "Oasis". Al entrar, sentí un alivio inmediato, casi como si el aire acondicionado supiera exactamente cuánto sol había acumulado mi piel. El espacio me envolvió. Y la cama... ¡Dios mío, la cama! Era tan vasta y profunda que me hizo preguntarme qué secretos susurraron las almohadas antes de que yo llegara.

Dormía como nunca. Un descanso sin sueños, profundo, reparador. La manta adicional, que a primera vista parecía un simple detalle, se convirtió en mi cómplice en las madrugadas, cuando el silencio del Ecoland se hacía tan denso que casi se podía tocar. Si el resort guarda un secreto, estoy segura de que mi habitación en "Oasis" es el lugar donde mejor se escucha.

🍽️ La Magia Culinaria: Desayunos que Atrapan

Uno de los puntos más destacados de mi estadía fue la comida. Todas las mañanas desayunaba con una selección deliciosa: arepas recién hechas, empanadas de queso, huevos al gusto, frutas tropicales como lechosa y patilla, jugo de guayaba bien frío y café fuerte, tal como me gusta.

Al mediodía, el buffet ofrecía platos variados: recuerdo un pabellón criollo completo con arroz, caraotas negras, carne mechada y tajadas, así como opciones más internacionales como pastas y ensaladas frescas. En las noches disfruté de pescado a la plancha con tostones, pollo guisado, parrilladas y sopas caseras que me sorprendieron por su sabor casero.

Los postres eran sencillos pero agradables: flan de caramelo, tres leches y gelatinas de colores que encantaban a los niños.

☀️ El Llamado Salvaje y la Gente en Sunsol Ecoland

Pasaba horas en la piscina principal, donde la música en vivo y las risas del equipo de animación creaban una burbuja de alegría. Era un escape perfecto. Probé cócteles tropicales en los bares —el mojito me dejó pensando si el personal de la barra era en realidad un alquimista— y disfruté de la cerveza fría con una rapidez que parecía sobrenatural.

Pero la verdadera revelación es la playa. Es amplia, sí, pero es su ambiente salvaje lo que cautiva. Las olas rompen con fuerza, como si la isla intentara decirte algo en un idioma antiguo. Caminar al atardecer, con una bebida helada en la mano, mientras el sol se hundía en el horizonte, no era un simple paseo: era una conexión profunda con algo indomable.

Y la gente. El personal. Esa es la pieza clave de todo este rompecabezas. Aunque el check-in se sintió como un portal lento, el calor humano posterior lo justificó todo. Los mesoneros no solo servían; me reconocían y anticipaban mis deseos. Había una cortesía y una sonrisa en cada rostro que me hizo preguntarme: ¿Sonríen así porque son felices, o es que conocen el secreto del Ecoland?

🗝️ Vuelvo por el Misterio

Sunsol Ecoland no es solo un hotel, es una experiencia completa. Entre desayunos criollos con arepas, almuerzos con sabor casero, cócteles junto a la piscina, caminatas por la playa y la compañía de un personal que realmente se preocupa por los huéspedes, pasé unos días que atesoro como una de las mejores vacaciones que he tenido.

Me fui sabiendo que dejo un pedazo de mi curiosidad atrás. ¿Qué esconden esos senderos? ¿Cuál es el ingrediente secreto de esa sopa? ¿Por qué el personal es tan genuinamente feliz?

Si buscas en Margarita un lugar que te ofrezca comodidad, buena comida, y un misterio sutil que te invite a volver para descubrirlo, Sunsol Ecoland es tu única opción.

Yo ya sé que regresaré. El Ecoland tiene algo que no me ha dicho por completo, y estoy dispuesta a escucharlo de nuevo. ¿Y tú? ¿Te atreves a descubrir su secreto?